reformas

Qué reformas no son rentables antes de alquilar tu vivienda

Cuando se trata de alquilar una vivienda, muchos propietarios piensan que hacer reformas mejorará la rentabilidad del piso y atraerá a mejores inquilinos, sin embargo, no todas las reformas son una inversión inteligente. Algunas pueden suponer un gasto elevado sin traducirse en una mayor rentabilidad o rapidez en la ocupación del inmueble. 

Las siguientes son reformas que es recomendable evitar antes de alquilar.

1. Renovaciones de lujo innecesarias

Instalar materiales de alta gama como suelos de mármol, grifería de diseño o electrodomésticos de gama alta puede parecer una forma de aumentar el valor del alquiler, pero en la mayoría de los casos, no recuperarás la inversión. Los inquilinos suelen valorar la funcionalidad y la comodidad por encima del lujo. 

2. Reformas estructurales costosas

Tirar paredes para crear espacios abiertos o cambiar la distribución de la vivienda puede ser un gasto enorme y, en muchos casos, innecesario. La mayoría de los inquilinos buscan pisos prácticos y bien distribuidos, pero no están dispuestos a pagar más por una distribución especial si el alquiler se ajusta a los estándares de la zona. Además, una reforma estructural puede alargar el tiempo en que el piso está vacío, reduciendo la rentabilidad total del alquiler.

3. Amueblar en exceso

Muchos propietarios piensan que ofrecer un piso completamente amueblado con muebles de calidad atraerá a inquilinos dispuestos a pagar más. Sin embargo, la realidad es que los gustos y necesidades de los inquilinos son muy diversos. 

Invertir en un mobiliario costoso que puede no ser del agrado de todos y que además sufre desgaste con el tiempo puede ser un error. Lo ideal es ofrecer un mobiliario funcional y neutro que pueda adaptarse a distintos perfiles de inquilinos.

4. Electrodomésticos de alta gama

Si bien es necesario equipar la vivienda con electrodomésticos en buen estado, comprar modelos de alta gama no suele ser una inversión rentable. 

Los inquilinos rara vez están dispuestos a pagar más por una lavadora de última generación o un frigorífico con pantalla táctil. Además, los electrodomésticos se desgastan con el uso, lo que puede generar gastos adicionales en mantenimiento y reparaciones.

5. Domótica y tecnología avanzada

Las soluciones inteligentes para el hogar como luces automatizadas, persianas motorizadas o sistemas de control por voz pueden parecer una gran idea, pero en la práctica, muchos inquilinos no valoran estas comodidades lo suficiente como para pagar más por ellas. Además, si la tecnología no es fácil de usar o requiere mantenimiento constante, puede convertirse en una molestia en lugar de un valor añadido.

6. Reformas muy personalizadas

Cada persona tiene sus propios gustos, y hacer reformas con un estilo muy marcado puede reducir el número de interesados en el alquiler. Colores de paredes demasiado llamativos, cocinas con diseños extravagantes o baños con acabados fuera de lo común pueden hacer que el piso no resulte atractivo para una amplia audiencia. 

Es recomendable optar por reformas con acabados neutros y atemporales que puedan adaptarse a distintos perfiles de inquilinos.

7. Piscinas o zonas de ocio privadas

Instalar una piscina en una vivienda de alquiler o diseñar espacios de ocio como una sala de cine o un gimnasio en casa puede parecer una idea atractiva, pero no es una inversión rentable en la mayoría de los casos. No solo suponen un coste elevado, sino que también requieren mantenimiento, lo que puede ser un inconveniente para el inquilino y una carga económica para el propietario.

8. Baños y cocinas de lujo

Reformar la cocina o el baño es una de las mejoras más habituales en las viviendas en alquiler, sin embargo, instalar encimeras de granito, suelos de mármol o duchas con hidromasaje no siempre es rentable. Los inquilinos buscan espacios limpios, funcionales y modernos, pero no necesariamente acabados de lujo que encarezcan el precio del alquiler.

9. Instalaciones poco demandadas

Cambiar la calefacción por suelo radiante, instalar sistemas de climatización avanzados o añadir paneles solares puede ser una buena inversión en una vivienda destinada a la venta, pero no siempre es rentable en un alquiler. Los inquilinos suelen valorar más la eficiencia energética y el bajo coste en suministros, pero no estarán dispuestos a pagar un alquiler más alto solo por estas mejoras.

10. Reformas que alargan el tiempo de alquiler

Cualquier reforma que implique una obra prolongada supone un tiempo en el que la vivienda estará vacía y no generará ingresos. Es importante evaluar el coste de oportunidad de cada reforma y asegurarse de que no se traduce en meses sin alquilar la vivienda. En muchos casos, una limpieza a fondo, pintura en colores neutros y pequeñas mejoras pueden hacer que el piso sea más atractivo sin necesidad de grandes reformas.

Zazume: Gestionamos tu alquiler sin complicaciones

En Zazume, sabemos que alquilar un piso puede ser un proceso complejo y queremos facilitarte la vida. Nos encargamos de todo el proceso, desde la publicación del anuncio y la búsqueda del inquilino ideal hasta la gestión de pagos, contratos y mantenimiento. Además, te asesoramos sobre qué reformas realmente aumentarán la rentabilidad de tu vivienda, evitando inversiones innecesarias. 

Qué seguros para casa existen y qué pólizas incluyen
Actualizar la titularidad de una propiedad antes de alquilar una propiedad