¿Se puede subarrendar una vivienda en España legalmente?
El concepto de subarriendo no es muy común, sin embargo, puede darse en determinadas circunstancias y por tanto, está regulado por la Ley de Arrendamientos Urbanos. Para subarrendar una vivienda en España es necesario hacerlo en base a lo que marca la legalidad vigente, teniendo además en cuenta los intereses de las distintas partes implicadas.
En este post vamos a ver qué significa el concepto de subarriendo y qué implicaciones legales tiene.
Qué significa subarrendar una casa
El concepto de subarrendar hace referencia a un alquiler que gestiona el inquilino. En este caso, no son los propietarios de la vivienda quienes actúan como arrendatarios, sino que es el inquilino quien ofrece el alquiler de la vivienda.
Son varias las causas que pueden provocar una situación de subarrendamiento, por ejemplo, un desplazamiento eventual durante el período de vigencia de un alquiler. En esta situación concreta, el contrato no se puede cancelar o pausar sin que el inquilino sufra un perjuicio económico o pierda sus derechos sobre el alquiler, por tanto, se puede plantear un subarriendo, siempre a instancias de las personas propietarias del inmueble.
La Ley actual en relación con el derecho al subarriendo de viviendas
Al igual que otras situaciones relacionadas con el alquiler, el subarriendo de una casa está contemplado por la Ley de Arrendamientos Urbanos, y por lo tanto será obligatorio llevar a cabo el subarriendo en base a lo que estipula la ley.
El artículo 8 de la Ley de Arrendamientos Urbanos estipula lo siguiente:
Artículo 8. Cesión del contrato y subarriendo
- El contrato no se podrá ceder por el arrendatario sin el consentimiento escrito del arrendador. En caso de cesión, el cesionario se subrogará en la posición del cedente frente al arrendador.
- La vivienda arrendada sólo se podrá subarrendar de forma parcial y previo consentimiento escrito del arrendador.
El subarriendo se regirá por lo dispuesto en el presente título para el arrendamiento, cuando la parte de la finca subarrendada se destine por el subarrendatario a la finalidad indicada en el artículo 2.1. De no darse esta condición, se regirá por lo pactado entre las partes.
El derecho del subarrendatario se extinguirá, en todo caso, cuando lo haga el del arrendatario que subarrendó.
El precio del subarriendo no podrá exceder, en ningún caso, del que corresponda al arrendamiento.
Condiciones del subarriendo en España
En base a lo estipulado con anterioridad, las condiciones que se extraen del artículo 8 de la LAU son las siguientes:
- Los propietarios de la vivienda deberán ser conscientes en todo momento de que existe una situación de subarriendo en el inmueble.
- Deberá existir un consentimiento por escrito, en el que se estipule el acuerdo firmado por todas las partes implicadas.
- Si el contrato de subarriendo no tiene fecha de finalización, se extinguirá con el contrato original.
- El precio establecido por el subarriendo nunca podrá ser superior al establecido en el contrato de alquiler original.
La importancia de informar a los propietarios
Al igual que sucede con la mayoría de las situaciones que regula la Ley de Arrendamientos Urbanos, la Ley establece una serie de requisitos generales, pero deja bastante libertad de acuerdos a todas las partes implicadas.
En el caso de un contrato de subarriendo, se incluye la posibilidad de hacerlo de forma legal, pero establece de forma explícita la obligatoriedad de informar a las personas propietarias del inmueble. Por tanto, un inquilino puede plantearse subarrendar la vivienda, por ejemplo si quiere alquilar una habitación, o si no va a ocupar la vivienda durante un tiempo, pero no quiere perder los derechos que le otorga el alquiler. En cualquier caso, siempre deberá solicitar permiso a los dueños del inmueble, y establecer un acuerdo por escrito.
Como propietario, ¿es obligatorio aceptar un subarriendo?
No, en ningún caso es obligatorio aceptar el establecimiento de un subarriendo en un inmueble. La decisión final acerca de un subarriendo depende de las personas que disponen de la propiedad de la vivienda, por tanto, de no aceptar los términos propuestos por el arrendador, el subarriendo no deberá llevarse a cabo en ningún caso.
Es importante también destacar que los dueños del inmueble no podrán en ningún caso lucrarse del subarriendo, el precio establecido por el subarriendo será íntegro para el arrendatario original.
Cómo se declara un subarriendo
Respecto a las implicaciones fiscales de un subarriendo, la declaración de estos ingresos es ligeramente diferente a la que se establece para los alquileres habituales. Los propietarios de un inmueble alquilado deben declarar los ingresos en el Rendimiento de Capital Inmobiliario, sin embargo los subarriendos se declaran en el apartado de Rendimientos del Capital Mobiliario.
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